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Papantla, Ver.-A diferencia de ediciones anteriores, Cumbre Tajín 2016 lució semivacío. Poca fue la afluencia de visitantes. Algunos funcionarios municipales y estatales atribuyeron que se debió a las condiciones climatológicas.
Pero los visitantes, consideraron que fue por el elenco artístico y el poco interés del Gobierno del Estado de Veracruz en seguir promocionando el festival que durante 17 años se ha desarrollado en esta zona del Totonacapan.
Lo peor es que hubo menos empleo, pues este evento para muchas familias de la región se había convertido en un escaparate para poder tener trabajo una semana, pero esta ocasión fue todo lo contrario.
Poca gente, poco empleo, poca asistencia. Cumbre Tajín no es que haya perdido su esencia pues los grupos locales y artesanos son quienes dan vida a este festival, pero desde un inicio el Gobierno estatal, modificó el alma de lo que tendría ser esta fiesta.
Contrató a grupos y artistas nacionales y e internacionales, como a Miguel Bosse entre muchos más que seguramente cobraban millonadas.
Pero ahora que el elenco fue como siempre debió haber sido –más cultural, con los artistas locales y los artesanos dentro de sus talleres mostrando la cultura- entonces pocos ciudadanos se interesaron en acudir.
En esta edición los pasillos no estaban repletos de gente queriendo entrar como en años anteriores, tampoco había largas filas tratando de adquirir los boletos, que incluso esta ocasión costaron 50 pesos menos.
Ahora el parque temático Takilhtsukut lucía más amplio, la gente podía elegir en qué espacio descansar, qué taller ir a visitar sin tener que esperar largas horas. Afuera los puestos ni ventas tenían.
Los autobuses no estaban cargados de pasajeros y por lo tanto la carretera Poza Rica-El Chote, no se colapsó con el tráfico; pues pareciera un día sin fiesta, un día casi sin Cumbre Tajín.
