Denisse Brauer /
Ciudad de México, 26 Junio 2016.- La convocatoria que lanzara el presidente de Morena, Andrés Manuel López Obrador, fue atendida por hombres y mujeres de la más diversa representación étnica, social y económica, ya que igual se veía a mujeres indígenas con amplias faldas largas típicas de estados como Chiapas, Guerrero, Michoacán, que hombres indígenas y campesinos o trabajadores, comerciantes, maestros, universitarios y jóvenes estudiantes.
Pese al pedimento de López Obrador de realizar la marcha en silencio, se escucharon que los asistentes, cuya cifra oficial no se ha dado a conocer- coreaban consignas como: ¡Fuera Peña!, ¡Maestro, resiste, el pueblo se levanta!”, ¡Unidos venceremos!”, “¡De norte a sur, de este a oeste, ganaremos esta lucha, cueste lo que cueste!”, “¡Fuera Peña y Mancera!” y “Va a caer, va a caer, la reforma va a caer!”.
Los puños levantados durante la marcha, fue una acción realizada repetidamente por todos los contingentes provenientes de 26 estados de la República, quienes después de viajar –algunos por más de 30 horas- recorrieron la avenida Reforma desde el monumento del Ángel de la Independencia hasta el templete que fue colocado a la altura de la Glorieta de monumento a Cristóbal Colón.
Ambos carriles de la avenida Reforma fueron ocupados por el contingente que acudió este día a la marcha, sin que se reportaran incidentes.
Los manifestantes señalaron que esta ocasión no fueron molestados durante el trayecto, sin embargo, al finalizar la marcha fue complicado que encontraran los autobuses donde venían, pues éstos por órdenes de los elementos de Tránsito, debieron moverse de lugar, lo que ocasionó que muchos asistentes tardaran en ubicar las unidades.
A decir del maestro Amilkar López Villalobos, secretario estatal de Jóvenes de Morena en San Luis Potosí, comentó que de allá salieron 22 autobuses con 45 plazas cada uno alrededor de la 1 de la mañana y su arribo a la Ciudad de México fue a las 7 de la mañana.
Comentó que consigo trajeron víveres que fueron a dejar al campamento de los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) que permanece en el espacio de La Ciudadela en esta ciudad de México, y posteriormente se dirigieron al Ángel de la Independencia para participar en la marcha.
Explicó que el perfil de las personas que acudieron a la convocatoria de la marcha es variado, ya que hay estudiantes pero también integrantes de organizaciones campesinas y trabajadoras, del Movimiento 132.
Comentó que la convocatoria fue bastante buena, “y una vez más quedó de manifiesto que las reformas y leyes que propone el gobierno federal no son queridas por la población y que no funcionan. Hoy se ve una fuerza de la sociedad civil que demuestra que puede detener lo que no le convence” y observó que si el gobierno no atiende esta lucha se desatará una guerra civil muy grande para defender nuestros derechos.
Por otra parte, Erick, profesor de nivel preescolar del Estado de México, comentó que dado los últimos sucesos el magisterio se ha cohesionado y afirmó que la mayoría acudió por convicción y por su propio pie y medios “porque las decisiones que está tomando el gobierno está afectando al magisterio”.
Comentó que los incrementos que deben recibir por ley los maestros han llegado a destiempo e incompletos, además de que las convocatorias para incentivar la carrera magisterial no fue emitida este año y el recurso se quedó en el gobierno.
Explicó que otro de los motivos por los que atendieron la convocatoria es por manifestarse en contra de los hechos ocurridos en Nochixtlán, Oaxaca, el domingo pasado.
Los médicos fue otro sector que atendió la convocatoria a la marcha en apoyo a los maestros del CNTE, Carlos Molina, médico del IMSS Michoacán, dijo que la educación y la salud son los servicios mínimos que debe procurar el gobierno a la población y no lo está haciendo.
Dijo que la atención médica se ha degradado últimamente, sin ser culpa esto de los médicos trabajadores, y apuntó que el número de médicos y recursos económicos para este rubro ha disminuido, no así el número de derechohabientes.
Resaltó que “un país sin educación va directo al fracaso pero un país sin salud va directo a la muerte”, y por ello dado las afectaciones que con los recortes presupuestales a este sector ocasionan en la atención que brindan los nosocomios del país, consideró necesario alzar la voz.
Los comerciantes de la Ciudad de México es otro sector que se sumó a la marcha, siendo su principal reclamo que les permitan trabajar, pues desde hace dos meses los quitaron de la avenida Hidalgo por apoyar al partido Morena, siendo aproximadamente 300 los comerciantes que se encuentran en esta situación.
El contingente de Zacatecas conformado por jornaleros, campesinos, trabajadores, maestros, estudiantes, también hizo acto de presencia en la marcha, exigiendo principalmente el cese a la represión y la matanza que el gobierno de la República ejerce a través de las fuerzas federales.
Los padres de familia también participaron, siendo un ejemplo de ello el contingente de la Mesa Directiva de Padres de Familia de Zacatecas quienes se pronunciaron por una educación gratuita “no estamos conformes con la reforma educativa por eso venimos a apoyar a los maestros y al pueblo en general, porque esta reforma nos perjudica a todos”.
Educación gratuita, respeto a los derechos humanos, diálogo del gobierno federal con el CNTE y que los diversos grupos de la sociedad sean también escuchados, fueron la exigencia de los asistentes a esta marcha.
