Sobre el inicio de las campañas
Por Plinio Soto Muerza
La esperada campaña federal por la Presidencia, Senado y Cámara de Diputados, formalmente comenzó el pasado el pasado 30 de marzo, pero es bien sabido que la campaña no oficial lleva un rato en el ambiente social del país. La novedad al final, son los 300 distritos federales, donde hicieron su aparición los candidatos a diputados federales, que arrancaron sus acciones para lograr el voto ciudadano.
Hasta el momento, el candidato presidencial de Morena ha logrado mantener una cómoda ventaja en todas las encuestas, y ha marcado la agenda y los tiempos de la campaña presidencial. Por todos lados, medios, candidatos, intelectuales, partidos, y demás actores de la vida pública, hablan de sus propuestas,; controversiales o no, todo mundo habla de la pretendida amnistía, la revisión a los contratos de Pemex, la marcha atrás de la llamada Reforma Educativa, los apoyos a los jóvenes, la revisión de los contratos por el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, aunque se construya en el Estado de México. En fin, todos los días desde hace ya varios meses, AMLO dicta la agenda y los ritmos de los tiempos políticos.
La estrategia del PRI y del PAN en las semanas pasadas se concentró en una fuerte pugna por ver quién de ellos subía más en las encuestas peleándose por el segundo lugar. Pero desde el pasado 30 de abril sus estrategias se han unido, y han desplegado sus baterías contra AMLO, con el respaldo de todos sus aliados. El objetivo trazado es “pegar” por todos los medios posibles, la base social electoral que ha construido AMLO, a fin de evitar su sostenido crecimiento en las preferencias de los ciudadanos. Para ellos, el principal objetivo es hoy, detener el crecimiento de AMLO para así en una segunda fase, tratar de bajarlo todo lo posible para acercarlo al umbral de los 30 puntos, para poder como última fase del plan, articular un voto a favor de sólo uno de los candidatos del PRI o PAN, y recurrir a la compra y coerción del voto, con el objetivo de llegar a un empate técnico desde donde puedan operar un fraude. La gran pregunta es ¿lo lograrán? ¿Podrán detener electoralmente a AMLO?
En el ánimo social pareciera que es irreversible el triunfo de AMLO, y la recién iniciada campaña ha mostrado que efectivamente el candidato de la coalición “Juntos haremos historia”, crece en intensidad y profundidad, mientras las restantes campañas se diluyen en un mar de conflictos e indecisiones.
En cualquier país democrático, cuando un gobierno genera tanto rechazo, y se muestra tan ineficaz para resolver los problemas sociales, el voto es el arma que tiene los ciudadanos para derrotar a ese gobierno. No hay un ejemplo en el mundo democrático, donde haya ganado el partido de un gobierno tan ineficaz y con altísimos niveles de rechazo social, al menos claro, que haya recurrido al fraude electoral para mantenerse en el poder.
El gobierno de Peña Nieto es hoy uno de los gobiernos con los niveles de rechazo más altos en el mundo, y su probada incapacidad por resolver los problemas sociales se agudiza por lo escandaloso del horizonte de corrupción, y de impunidad que ha cobijado. En esas condiciones, un triunfo de su partido el PRI y su candidato Meade sería dudoso, cuestionado y muy impugnado. ¿Se le puede creer al PRI una remontada de más de 20% en las encuestas?
Por otro lado, el PAN pareciera que se queda sólo en su alianza con el PRD, ya que a este último, sus últimos bastiones de votantes históricos se han desplazado hacia morena, y sólo conserva sus votos corporativos donde es gobierno como en Ia Ciudad de México; además la división interna del panismo es a todas luces insalvable para su candidato Anaya, que no tuvo empacho de desplazar al panismo tradicional para empoderar al interior del PAN a un sórdido grupo de políticos sin principios ni miramientos éticos.
Al final, los pretendidos independientes tuvieron un triste ocaso. Para Jaime Rodríguez, el “Bronco”, y Armando Ríos Piter, el “Jaguar”, la cueva del zoológico político les espera al no poder comprobar que las firmas que presentaron eran genuinas, y la sombra de la compra de credenciales cae sobre ellos. Mientras tanto, para la ex primera dama Margarita Zavala, quien estuvo hace apenas 6 años en la residencia oficial de los Pinos, y por lo tanto es cómplice y responsable de las decisiones que se tomaron en el trágico sexenio del “haiga sido como haiga sido” de Felipe Calderón, no logra cuajar en el ánimo de los ciudadanos que la ven con recelo, y con sobradas sospechas, mientras su tono de voz y sus discursos se parecen cada día a los que se pronuncian en los actos de caridad de las familias filantrópicas.
De tal forma todo indica en este inicio de campaña oficial, que la ventaja de AMLO es lugar de reducirse puede seguir creciendo con lo que aseguraría su base social electoral para un previsible triunfo en las urnas el 1 de julio.
Sin embargo, el tema que acompaña el debate de la ventaja de AMLO y el rezago de sus contrincantes, es el referente a los candidatos a senadores y diputados federales. La gran interrogante es conocer si a morena le alcanza con la ola de su candidato presidencial para llevar al triunfo a buena parte de sus candidatos, la inmensa mayoría de ellos desconocidos para los electores en sus distritos. Trepados en la ola morenista, en este inicio de campaña algunos han dejado ver verdaderos actos de soberbia, confundiendo el apoyo incondicional a AMLO con un apoyo a ellos mismos, sin darse cuenta del significado que encierra la actual coyuntura histórica.
Y es precisamente en los procesos de las candidaturas a diputad@s federales, donde morena tiene hoy sus puntos más débiles, y sobre este tema es preciso hablar, comentar y debatir.
Continuará…
Vamos por más