Darío Palé /
Se registran hasta 7 desapariciones diarias en Xalapa y en estos últimos meses se han unido al colectivo unas 20 familias, no obstante advirtió que hay quienes no quieren denunciar, por lo que no hay una cifra precisa, así lo informo Sara González Rodríguez, presidenta del Colectivo por La Paz.
En el marco del Día Internacional del Desaparecido, la activista acusó al Gobierno del Estado de querer ocultar los datos, y es que dijo que en los nueve meses que lleva la administración de Miguel Ángel Yunes Linares, la situación «esta peor» que en el periodo de 2010 a 2011.
Señaló que este gobierno se ha encargado de ocultar las cosas, ahorita estamos peor que antes, ya que el actual gobierno está más interesado en su cacería de brujas que en lograr resultados para las familias de desaparecidos, es un gobierno sin resultados, sin interés por ellos.
Del mismo modo, sostuvo que tanto el fiscal General del Estado, Jorge Winckler Ortiz, como el gobernador Migue Ángel Yunes Linares, se han mostrado ajenos a las necesidades de las familias que llevan años buscando a sus desaparecidos y calificó al gobierno yunista de «mediocre» e «indolente».
«Las desapariciones cada vez son más, tenemos más reportes, cada día se registran desapariciones y lo peor es que en esta administración hasta niños se han perdido».
Acusó también que el fiscal sólo abre las puertas cuando viene Roberto Campa Cifrián, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación (Segob), sin embargo pese a las visitas de Campa Cifriàn, dijo que sigue sin haber resultados para las familias que siguen exigiendo se trabaje en el tema.
Dio a conocer que Roberto Campa lo que viene a hacer es a buscar tranquilidad con las familias de desaparecidos, viene y dice que todo está bien, pero en realidad las cosas marchan mal, tenemos cada vez más desaparecidos y no vemos nada de resultados.
Finamente refirió que la Fiscalía General del Estado (FGE) tiene como fecha límite hasta el mes de octubre, para entregar los resultados de los cuerpos que se encontraron en abril pasado en Colinas de Santa Fe y Arborillo en Veracruz.
