Básico y local.
A Winckler, o no Winckler
Por. Hilda Hermida Delgado
Ya lo adelantaron las fuerzas políticas de oposición el pasado primero de diciembre, no permitirán que el nuevo Fiscal General del Estado se elija por la puerta de atrás. Jorge Winckler Ortíz, tiene un pie afuera del ente autónomo.
Todos tienen miedo, y no es para menos, de que se repita la historia vivida con Luis Ángel Bravo Contreras, primer fiscal de Veracruz, quien es acusado de haber sido omiso en la procuración de justicia de los veracruzanos, sobre todo hacia los casos de desaparición forzada así como agresiones mortales a periodistas.
Juntos por Veracruz, Morena y PRI, prometen hacer de la discusión en búsqueda de un nuevo abogado del Estado, larga, sin dedazos, sin Winckler.
Y será hasta el próximo 24 del mes cuando se conozca las propuestas y se defina la terna que decida el Gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares. Lo explicó el presidente de la Junta de Coordinación Política, Sergio Hernández Hernández, los mejores perfiles van a entrar y quien represente la capacidad para impartir justicia, ese será elegido, Winckler o no, Winckler o Juan Pérez.
El abogado, conocido y señalado como persona cercana a la familia Yunes, tiene dedos detrás de él apuntandolo de privilegiado, pues en cuestión de capacidades, no se ha señalado lo contrario. Esa es la cruz que está cargando el primer visitador de la FGE con la salida de Bravo Contreras, quien de no haber llegado de una forma tan predecible, su propuesta en la terna hubiera sido menos obvia, solo un poquito menos obvia.
Hablando de los llamados privilegiados, buena tunda, dirían las abuelitas, ha recibido el Secretario de Gobierno, Rogelio Franco Castan, por haber recibido su título de licenciado en Derecho de la Universidad Veracruzana en diez días.
Menudas críticas se han direccionado a la rectora, Sara Ladrón de Guevara, de parte de la sociedad en general y medios de comunicación. Los egresados de ahora en adelante exigirán que el esperado trámite pase de seis meses al lapso estilo Rogelio Franco. No extrañaría que en breve pudiéramos leer en Redes Sociales memes o hashtag sobre su forma de titulación tan eficaz y express del segundo a bordo del cogobierno.
Quién diga que el cargo de Secretario de Gobierno, por ley necesita de una cédula profesional no ha leído la Constitución, expresó la tarde de este miércoles el perredista, y a su vez solicitó no hablar más del tema que lo ha puesto en el ojo del huracán los últimos días como una bienvenida al puesto que antes de ser gobernador interino, ocupó Flavino Ríos Alvarado, asegurando paz social y gobernabilidad en medio de la crisis que todos sabemos, se vive en territorio jarocho.
Definitivamente si a la mayoría de la sociedad veracruzana no le «cimbró» la ridícula cantidad en miles de millones de pesos con la que Javier Duarte de Ochoa y sus cómplices adquirieron múltiples propiedades con el desvió de recursos, es que este prófugo, nos ha robado algo más: nuestra capacidad de asombro.
Durante el discurso del hoy Gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, en el Congreso Local, se acercó a la población a un poquito del saqueo ya imaginado pero no detallado en los últimos años del sexenio de Duarte de Ochoa.
Mil 250 millones de pesos en propiedades. Casi cien millones de pesos en transporte aéreo. Millones de pesos en obras de arte, que aún está por detallar la Fiscalía General del Estado. Cientos, miles de millones de pesos por recuperar, por descubrir, por reintegrar a la población veracruzana.
Mientras el Gobernador electo, en ese entonces, aseguraba que cimbraria a México con la información que daría en su toma de protesta, un mundo lleno de posibilidades se abrió, la especulación sobre las revelaciones que haría el panista creció, incluso la expectativa apuntaba hacia el anuncio sobre la ubicación de Duarte de Ochoa.
Sin embargo, los presentes se decepcionaron, las masas enojadas por el atraco, esperaron más. Creyeron entre su sed y fe de justicia que ese día, en el esperado cimbrar de México, se presentaría al prófugo y como en los cuentos de Disney, tendrían por un día el final feliz de las telenovelas de Televisa.
¿Quién o quienes cayeron más rápido que con un cojo en el Congreso Local al unirse al PRI? Hay dos colores.
