Plinio Soto Muerza
Iniciando el año Morena se ha estrenado como partido con responsabilidad de gobierno. Por primera vez el partido que se presenta como la esperanza de México, tomará las decisiones cruciales para el desarrollo de los habitantes de 16 municipios veracruzanos, incluidos 4 de los más importantes y poblados en el estado. En la lista de los municipios que hoy gobierna Morena, sobresale por su importancia estratégica, la ciudad capital: Xalapa.
Es tal la importancia de gobernar Xalapa, que de su administración dependerá el futuro de los esfuerzos morenistas veracruzanos. En el marco nacional, la capital veracruzana será la tercera ciudad, por su número de población, que gobernara Morena con sus 480, 841 habitantes según el INEGI, después de las delegaciones de Tlalpan (677,104), y la delegación Cuauhtémoc (532,553). Como dato adicional, el presupuesto de la capital veracruzana para el 2018 aprobado por el Congreso del Estado, será de $1,424,537,630.84 pesos.
En su nuevo caminar como movimiento y gobierno, Morena no puede darse el lujo de equivocarse, y tendrá la presión de rendir resultados a una ciudadanía ávida de cambios profundos en su vida cotidiana. Lo que le suceda al gobierno de Morena le marcara su proyecto para los años venideros.
Muchos son los temas que están emergiendo como prioritarios en la agenda municipal del gobierno morenista xalapeño. Sin duda uno de ellos es el referente a la inseguridad, máxime cuando en los primeros días de enero un par de hechos ensombrecieron el ambiente, creando una percepción mayor de incertidumbre.
Pero otros temas tendrán que ponerse al alcance de las decisiones de la administración municipal; temas que parecieran sencillos de atender y que la ciudadanía espera pronta respuesta. Por ejemplo, el caso de la movilidad urbana, y en concreto de las rutas de transporte urbano, que tienen a los ciudadanos como verdaderos rehenes.
No hay ruta alguna en Xalapa que ofrezca un servicio medianamente confortable y eficiente. Camiones que presentan verdaderos riesgos a sus pasajeros, con unidades en mal estado, con pésimo servicio en el trato por parte de los conductores y un sinfín de problemas que se derivan por años de prácticas viciadas de manejos de control clientelar por parte de las autoridades. Es urgente que las nuevas autoridades municipales ofrezcan un menú de acciones en la redefinición que brinden a los ciudadanos confianza y evitar que las unidades de servicio público de pasajeros sigan usando las calles y avenidas como si fueran de su propiedad, ocasionando tráfico y causando verdaderas molestias a los usuarios.
Algo se tendrá que hacer para evitar que los camiones hagan la famosa “base”, sin importarles que atrás de ellos haya miles de ciudadanos que esperan una circulación vehicular fluida y en perfecta sincronía.
Tema aparte son el rescate de los espacios públicos como parques y centros de reunión. Los habitantes de Xalapa han visto perder estas áreas ante el deterioro y el abandono. ¿Qué tanto puede hacer un gobierno municipal para que los ciudadanos regresen a disfrutar de plazas públicas? Las respuestas se esperan con buen ánimo desde la ciudadanía y no deben de tardar en concretarse.
Es posible que en estos momentos, el gobierno municipal esté desarrollando planes y acciones, pero es menester que la información fluya abiertamente hacia la ciudadanía. Mantener en sigilo lo que se pretende hacer es lo que se debe de evitar, en ese sentido el escrutinio público es el arma que sectores de la población xalapeña estarán enfilando hacia las oficinas del gobierno municipal.
En el nuevo gobierno de Xalapa habrá errores y se conocerán decisiones difíciles y complejas; gobernar no es tarea fácil. A nivel nacional se vive un momento de lucha política que impactara en la relación gobierno-sociedad. Siendo Xalapa la tercera ciudad gobernada por Morena, vendrán ataques virulentos contra su proyecto nacional, y estarán bajo la lupa todas sus opciones a tomar para resolver problemas. Ante tal escenario, se esperaría que desde las oficinas municipales la voluntad de hierro se muestre, y la tenacidad y el compromiso con la gente se manifiesten. No hay duda que muchos funcionarios que hoy están en el palacio municipal de Xalapa están hechos en la lucha por una mejor ciudad.
Así las cosas, la importancia de gobernar Xalapa se traducirá en los pequeños cambios de las pequeñas cosas que cotidianamente tienen que sentirse en la comunidad xalapeña, El paso de los cambios se ira acelerando con el propio movimiento social. En ese sentido, Morena no puede equivocarse; hacerlo le puede costar mucho más que el gobierno de un municipio.
