Xalapa, Ver.- Ha sido aprobada la reestructuración de la deuda propuesta por el Ejecutivo del Estado. Al respecto, existen varias manifestaciones que restan honorabilidad al congreso local. Sin embargo, la aprobación fue para dar un nuevo derrotero al desaseo político, económico y social que vivimos.
A partir de esta semana esperamos que el gobierno actual cumpla sus promesas de campaña; la sociedad veracruzana reclama obras y servicios prioritarios. El PT exige que el dinero conseguido no se desvié hacia acciones proselitistas en favor de los partidos gobernantes.
En materia de seguridad, el Partido del Trabajo hace un llamado a los gobiernos federal y estatal para que garanticen el ejercicio de la libertad de expresión; en virtud de ser el gremio periodístico víctima de ataques.
La muerte del periodista Ricardo Monlui no puede sumarse a una estadística de víctimas; el gobierno federal y estatal debe cumplir con su obligación, proteger y procurar justicia a los ciudadanos veracruzanos. Incondicionalmente, apoyamos al gremio de periodistas en el estado y en cualquier lugar pues son parte de la vida democrática que impulsa nuestro partido.
En otro contexto, para el PT resulta imprescindible denunciar la injerencia del sector eclesiástico en la vida política y laica del Estado.
Hoy, vemos que desde el púlpito los curas y pastores atacan la libertad de las preferencias sexuales; sin comprender que sus manifestaciones pudieran estar fomentando mayor homofobia contra esta población; que durante los últimos días han sufrido ataques, al grado de llegar a pérdidas humanas. Cierto es que el sector eclesiástico es parte de la sociedad y que tiene iguales derechos que todo ciudadano; sin embargo, deben excluirse el uso de los templos para hacer política, que tienda a fortalecer algún partido o candidato. Por lo anterior, conminamos a este sector a conducirse dentro del marco legal.
Por otro lado, apoyamos las tareas que ha propuesto el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas con respecto a la creación del Frente Nacional Progresista; en el que todo actor político deseoso de un cambio verdadero, pacífico y democrático tenga cabida. Creemos en su lucha por ser un hombre progresista de izquierda, por su capacidad de convocatoria y recuperar el desarrollo perdido, la dignidad y soberanía para beneficio sostenido de todos los mexicanos. Concordamos con él en que la política energética actual está creando problemas que entrañan gravísimos riesgos para la estabilidad económica y social del país y que ya constituyen problemas de desarrollo para el futuro inmediato.
El Partido del Trabajo hace suyas las denuncias del ingeniero; tales como la falta de legitimidad política y moral; el desmantelamiento de las instituciones que el país tardó en construir 80 años, entre otras cosas. Al igual que Cuauhtémoc Cárdenas, al PT le preocupa los problemas que causará la liberación de distribución de gasolinas el próximo 1 de abril; sabemos que conlleva, también, la liberación de los precios y con ello, la creación de mayor inflación. Seguiremos luchando junto a la sociedad para lograr que, primero, el precio de las gasolinas sea el que tenía en diciembre de 2016; después, para que se reduzca a $10.00 pesos el litro, tal y como lo propone nuestro Partido en el Congreso de la Unión.
Por último, informamos que las puertas del PT siguen y continuarán abiertas para los aspirantes a ocupar un puesto de elección en el proceso electoral actual. No los defraudaremos como otros partidos que han enseñado “el cobre” y que no tienen nada de democráticos. A todas luces se ve que esos partidos y sus candidatos tienen el cobijo de las autoridades electorales; pues, violentan todo marco legal y continúan en precampaña. Sin embargo, no lograrán engañar al electorado. Una vez más, el Partido del Trabajo saldrá avante.
