Xalapa, Ver.- El ex candidato del PRI a la gubernatura de Veracruz, Héctor Yunes Landa,  pidió al gobernador Javier Duarte, que solicite licencia definitiva al cargo por lo que calificó de agravios a Veracruz a la imagen del PRI luego de todas las iniciativas que ha tratado que se aprueben en el Congreso del Estado y la mala gestión de los recursos financieros.

A continuación el mensaje íntegro que emitió la tarde del lunes el también Senador con licencia:

Señoras y señores:

Veracruz vive momentos de gran zozobra.

Padece un asalto a la legalidad, a la legitimidad, a la moralidad y a la ética.

Este estado de alarma, polarización y confrontación, se ha generado desde la cabeza misma de las instituciones veracruzanas.

El jefe del Ejecutivo del Estado, Javier Duarte de Ochoa, quien juró cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes, ha deshonrado su palabra y lastimado a Veracruz.

Por ello, hoy la sociedad le demanda que cumpla con su compromiso de defender a nuestro estado.

Hay una descomposición que agrede a los ciudadanos.

Se está hipotecando el futuro de generaciones enteras de veracruzanos.

Hay un esfuerzo irracional por lastimar a la sociedad a través de quebrar al estado, pervertir el proceso legal, coaccionar a legisladores, suprimir en los hechos la división de poderes y destruir a la administración pública.

No lo vamos a permitir.

La cadena de atentados contra la vida pública de Veracruz es lastimosa y consternante:
1) La iniciativa para comprometer el destino de miles de millones de pesos, provenientes del Impuesto a la Nómina, al pago de pasivos, muchos de ellos sospechosos, en lugar de destinarlos al desarrollo de infraestructura como la ley lo contempla.
2) El intento de nombrar a personas afines para investigar e impartir justicia.
3) La manera simplista de resolver el problema del IPE.
4) La donación sumaria de inmuebles emblemáticos de nuestro estado.

Señoras y señores.

Los problemas de Veracruz, gravísimos, no se resuelven con ocurrencias.
El capricho no es política pública.

Hay que resolver el tema financiero de Veracruz y pagar a proveedores, pero eso demanda auditar los trabajos adeudados y generar ahorros, refinanciamientos y mecanismos de pago sin comprometer los ingresos del estado.

Hay que atender a los pensionados, a quienes admiramos y respetamos, pero no es dilapidando los inmuebles públicos como vamos a resolver el tema del IPE.

Resolver a fondo, sin frivolidad ni populismo, el tema estructural de las pensiones implica una ingeniería financiera, legal y política de primera magnitud. Decirle lo contrario a los pensionados es mentirles.

Señoras y señores.

Cuando un gobernante demuestra su incompetencia para resolver los problemas de su sociedad, se deben tomar medidas excepcionales para remediarlo.

Ante esta situación, convoco a la opinión pública para que respalden de manera activa, inmediata y pacífica, una serie de acciones que propongo a continuación:

Primero: Solicito al titular del Poder Ejecutivo del Estado de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa que, por dignidad, solicite licencia para separarse de manera  definitiva del cargo de Gobernador del Estado de Veracruz.

Segundo: Que de manera simultánea a la petición de licencia, se retiren las iniciativas presentadas que comprometen gravemente el porvenir de millones de veracruzanos.

Tercero: Que cesen de manera inmediata las amenazas y coacciones contra  miembros del PRI y aliados, que han manifestado su oposición a los intentos de hacer naufragar a Veracruz, incluidas las diputadas y diputados locales que han impedido, con dignidad y valentía, la aprobación de iniciativas que lastiman a la entidad.

Javier Duarte de Ochoa ha incumplido de manera manifiesta su juramento de guardar y hacer guardar el Estado de Derecho en Veracruz.

Hago un llamado a todas las fuerzas políticas de nuestro estado para recuperar la prudencia y la sensatez.

Hay que pensar en Veracruz antes de dar rienda suelta a los odios personales.
México vive hoy momentos difíciles y Veracruz presenta una situación excepcional que demanda altura de miras y medidas también excepcionales.

Concluyo con un ejercicio de autocrítica:

Los priistas reconocemos los agravios que Javier Duarte de Ochoa ha causado a Veracruz y, en consecuencia, a la imagen de nuestro partido. Los priistas, en nuestra gran mayoría somos gente bien nacida y honorable que siempre hemos abonado en el propósito que a Veracruz y a México siempre les vaya bien.

Lamentamos, mucho lamentamos que un militante de nuestro partido, Javier Duarte de Ochoa, haya encabezado, quizá, la peor gestión que se recuerde en nuestro estado.

 

 

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