Básico y local.

Los protagonistas.

Por Hilda Hermida Delgado

Van 19 días transcurridos, de la entrada en funciones de la sexagésima cuarta legislatura y el protagonismo de algunos diputados locales ha comenzado a brotar. Entre los radicales del partido Movimiento de Regeneración Nacional y el dramatismo al interior de la bancada del Partido Acción Nacional, está la primera actriz de la historia, la también comunicadora, Marijose Gamboa Torales.

Bien se sabía que durante las comparecencias de dependencias estatales organizadas por la actual legislatura surgirían acusaciones, señalamientos, chismes, chistes, equivocaciones, aburrimiento, malas preguntas, cuestionamientos repetitivos, cinismo, mentiras, datos, cifras; pero jamás el sentimiento de rencor explosivo, como lo describieron los presentes, que se vivió el pasado sábado en la rendición de cuentas de Irma Chesty, coordinadora de Comunicación Social del Gobierno Estatal.

Se cuenta, que Gamboa Torales, con documentos en mano, refutó cada una de las respuestas de la funcionaria estatal. Muy a su estilo, y nunca, haciendo a un lado que su papel en los Medios de Comunicación, fugaz o no, le da la experiencia para emitir juicio sobre los vicios que se sabe, se vive en este enorme negocio de la difusión informativa.

Algunos de los presentes, en Redes Sociales, llámese reporteros que ese día cubrieron la comparecencia, criticaron a través de sus cuentas, la actitud de la legisladora, que más allá de indagar, como es su deber, aprovechó para sobre salir señalando y acusando de una manera característica, con el toque de su personalidad.

En esa misma semana, la legisladora, también fue noticia, soltó una bomba que al menos para el gremio periodístico no pasó desapercibida. La Comisión Estatal de Protección a Periodistas, tiene dos aviadores con jugoso salario. La Comisión ha repartido becas educativas, pasa una cantidad mensual a reporteros, todo esto sin transparentar el origen y destino. La CEAPP, ha costado al erario público 80 millones de pesos y no pudo proteger a los compañeros muertos, desaparecidos y exiliados.

Por otro lado a Mariana Dunyaska García, también blanquiazul, se le ocurrió señalar que había comunicadores de primera y de segunda, provocando cierto enojo entre el gremio presente replicado vía Facebook, pues este término, puede ser entendido de diferentes maneras si no es aclarado y explicado con pinzas a los involucrados directos en el señalamiento.

Es cierto que en múltiples ocasiones, antes de llegar a la curul, Sergio Hernández Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso Local, advirtió que el formato de las comparecencias sería distinto. Por primera vez, en muchos años, los secretarios estatales no irían a lucirse, sino a informar el manejo de la dependencias, los protagonistas, serían los diputados.

Sin embargo, este ejercicio que sigue en curso, ha pasado en algunos casos, de ser interesante a convertirse en rendiciones de cuentas tediosas, maratónicas y algunas veces aburrida, hasta para los mismos legisladores. Estos desfilan de un lugar a otro mientras sus compañeros de la comisión interrogan una y otra vez a los flaviduartistas, quienes en varias ocasiones han tenido que responder cinco veces la misma pregunta de los legisladores por no quedar claro o por no poner atención en lo que su compañero anterior cuestionó.

También, meses antes de tomar protesta, Hernández Hernández, (el estratega), hablaba de un nuevo orden al interior del Congreso Local, una nueva forma de trabajo que ya no incluyera las mismas prácticas priistas, los vicios. Para eso, ya había escogido a su principal brazo ejecutor de esa visión, a una periodista con gran trayectoria en la entidad. Verónica Danell, brillaba entre los nombres para encabezar la coordinación de Comunicación Social de la Legislatura Local, hasta el sábado pasado, cuando se dio a conocer el cambio repentino, y desde la JUCOPO, se eligió a Sergio Melo, prestigiado consultor de medios.

Mucho se ha especulado de lo sucedido, algunas fuentes afirman que priistas y morenistas, bajaron a Danell al considerarla parte del panismo, tanto que se volvería a caer en la misma cucharada que con Vicky Hernández, quien estaba vinculada al PRI y favoreció durante los tres años en todo momento al grupo parlamentario.

Otros, aseguran que fue Marijose Gamboa la que bajó a la periodista Verónica, ex corresponsal de medios nacionales, por diferencias personales en el pasado. Lo cierto es que, pese a la gran labor de conciliación que Sergio Hernández, ha venido realizando en menos de un mes en la junta de Coordinación, le han arrebatado a una de sus grandes aliadas y favoritas para establecer el orden.

En este arranque de la sexagésima, se ha dado de que hablar, desde morenistas que se han pronunciado independientes, diputados que han sido señalados y atacados por estar relacionados con funcionarios de dudosa honorabilidad, hasta sorpresas agradables como la de Yazmin Copete Zapot, diputada perredista que comienza a sacar la casta mostrando su experiencia política.

Hay quienes afirman que los diputados locales en estas comparecencias se han pasado de brillo.
Lo que se agradece: el orden, la ausencia de acarreados. Lo que se extraña, los tacos al pastor y las matracas.

 

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