Xalapa, Ver.- Para el presidente de la Asociación Mexicana de Ingeniería en Vías Terrestres de Veracruz (AMIVTAC), ingeniero Rafael Mendoza Vejar, es necesario que el próximo gobierno de Veracruz realice una depuración en el padrón de contratistas del Gobierno del Estado.
En el marco de la celebración por los 125 años de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, evento celebrado en las instalaciones del Centro SCT Veracruz, manifestó: “Con la alternancia política y democrática que vive Veracruz, es momento de que los gobiernos entiendan que cada día los ciudadanos exigimos más y mejores servicios, y entre esas exigencias está la calidad de las obras públicas; en nuestro caso, las obras de infraestructura, pero en general, todas.
De acuerdo a su experiencia en la verificación de calidad de obras, señaló que dos de las causales por las que las empresas no cumplen con las especificaciones técnicas en los procesos constructivos de las obras son la inexperiencia y la falta de conocimientos: “Nosotros consideramos que es indispensable que las empresas que contrata el gobierno cuenten con la suficiente experiencia y los conocimientos técnicos para asegurar la calidad de las obras que contraten.”
No se trata de una opinión gratuita, sino de una demanda social que le cuesta mucho a los veracruzanos porque una obra hecha sin calidad resalta más cara y es un permanente peligro, enfatizó:
“Una obra de mala calidad aparte de representar un riesgo para el usuario significa una pérdida económica para el Gobierno, ya que implicará reparaciones mucho antes de que venzan los plazos considerados de su vida útil, así como mantenimientos periódicos más costosos. Por eso pensamos que una buena medida que debe considerar el próximo gobierno será la de depurar el padrón de contratistas, pues no se vale que se sigan teniendo empresas golondrinas o todólogas, que sin contar con personal técnico, infraestructura, capacidad financiera y una experiencia mínima necesaria, sean favorecidas con la asignación de contratos.
Finalmente sugirió que para lograr lo anterior el nuevo gobierno podría crear un consejo técnico y plural que evalúe a las empresas que trabajarán para el gobierno: “Tras la depuración vendrían el establecimiento de criterios de medición para calificar las capacidades de cada empresa que a su vez deberán de suscribirse a parámetros meramente técnicos y valorados por especialistas en cada área, pudiendo para ello hasta formar un consejo técnico para que valore el perfil de las empresas y ese mismo consejo puede dar cabida a la participación de miembros de la misma sociedad.”
