Línea Política
VERACRUZ, A LA DERIVA
Agustín Contreras Stein.
ACOSADO por la difícil situación económica y secuestrado, prácticamente, por la evidente inseguridad que priva en todos sus rincones, Veracruz, se encuentra ahora, a la deriva.
Todos los días es noticia nacional e internacional, debido a la violencia generalizada que se ha apoderado de su territorio, de sus autoridades y consecuentemente de la tranquilidad de sus habitantes.
Y no es caer en la constante repetición de lo mismo.
Es, sencillamente, puntualizar una condición que se ha generado desde hace varios años y que ninguna autoridad ha logrado resolver.
En su intento de lograr la gubernatura del Estado, el ahora titular del Poder Ejecutivo, Miguel Ángel Yunes Linares, ofreció a los veracruzanos, acabar con este fenómeno social de grandes dimensiones.
No lo ha logrado, porque se trata de un verdadero reto que requiere tiempo, recursos económicos y sobre todo, buena voluntad para hacer lo que el mandato popular, requiere.
Acabar con la violencia, es un proceso largo, de implementación de grandes medidas hasta cierto punto dolorosas, pero necesarias para poder terminar con el flagelo. Yunes Linares, esta más que comprometido a realizar la tarea que le corresponde en sus dos años de gobierno. Ya serán las demás administraciones las que se encarguen de continuar el proceso y sobre todo, de empeñarse constantemente para que funcione.
Enfrentar en este momento a la violencia, a los grupos que le generan y a todo el escenario descompuesto por la misma situación que impera desde hace muchos años, es una tarea titánica. Se necesita voluntad permanente, se requiere priorizar las acciones gubernamentales para este caso y aplicar los recursos que sean necesarios, siempre y cuando se tengan, para hacer una labor gubernamental de dos años que valga la pena.
Veracruz, casi pierde la esperanza y las autoridades, casi pierden la batalla.
La lucha coordinada no ha tenido resultados positivos, o quizá, por el pretexto político que siempre sale a relucir, impida que las acciones concreten sus objetivos, porque no se entiende tanto anuncio de aplicación de la justicia, cuando todos los días, el pueblo sufre y vive miserablemente su momento.
Así las cosas, al gobierno federal, y al estatal, prácticamente, se les va de las manos la mejor oportunidad de resolver uno de los grandes problemas que le aquejan.
Porque eso sí, el pueblo ya no quiere queso, sino salir de la ratonera.
Y es que, ante el panorama que se advierte más difícil conforme pasa el tiempo, las voces que se escuchan anuncian que la misma sociedad ha pedido no tener más obras materiales, sino una verdadera tranquilidad, pues ahora más que nunca ha valorado lo que cuesta la seguridad personal, la de su familia y la de sus bienes.
Pero tanta es la desesperación que Veracruz, teniendo hambre, solo pide que le den tranquilidad.
Hasta la falta de empleos, mal o bien remunerados, su propia aspiración a los alimentos y hasta la medicina, estaría dispuesto a cambiar con tal de que un día se diga que su territorio esta seguro, esta tranquilo, que le han devuelto la calma de otros tiempos y que ahora, sí, con hambre, pero con ganas, buscará salir, como todos los pueblos agredidos, adelante.
Pero, por ahora, Veracruz, se encuentra a la deriva, pues no hay quien decida dar el golpe de timón y enderezar la nave.
No hay quien se atreva a poner el orden y estabilizar el rumbo de una entidad pujante, a la cual, solamente, hay que darle los elementos necesarios y la plena garantía de que es verdaderamente seguro.
————————
Y PASANDO A OTRAS COSAS, nuevamente el Instituto de Pensiones del Estado, se convulsiona.
Ayer, por una de las alas de Palacio de Gobierno, hubo manifestaciones de trabajadores pensionados.
Exigían al Gobernador del Estado, su pronta intervención para concretar las denuncias que se hicieron en contra de los miembros del Consejo General del IPE, a los cuales se les acusa de ser copartícipes en el robo de los recursos que forman parte de la reserva técnica de la propia institución.
Es un caso, casi histórico, pues como tanto se ha comentado, el IPE, le ha servido a varias administraciones estatales, como sostén económico para llenar los huecos que por otros lados hacen.
Así ha sido la historia, pero lo peor de todo, es que los gobiernos del pasado, le han pedido en calidad de préstamo diversas cantidades que se han retirado de su caja, pero que nunca le han pagado, constituyéndose una histórica deuda que ha generado que el IPE haya estado a punto de quebrar por la falta de recursos, cuando en realidad, debería tratarse de una institución totalmente capaz de resolver sus problemas económicos con toda facilidad, tanto que los propios pensionados no tendrían la necesidad de salir a las calles para protestar por el saqueo de sus arcas.
Al IPE le han querido pagar con terrenos, con estadios y con bienes del propio Estado, porque dinero, una vez salido, nunca se lo han querido regresar.
De ahí que los pensionados acusen con certeza a quien o quienes hacerlos responsables de estos saqueos, y ahí es donde aparece el Consejo General de la institución, cuyos miembros debieron, en su tiempo, aprobar los préstamos al gobierno y no exigir, por así convenir a sus intereses políticos y económicos, a que se le devuelvan los recursos que se le han prestado.
Justa, pues, la reclamación y justo es el derecho de exigir que ladrones devuelvan lo que pertenece solo a los trabajadores, reserva constituida por cuotas descontadas de sus sueldos.
—————————-
LA REALEZA ESTA CAYENDO poco a poco.
Varios reyecitos del Gobierno, ya están a buen resguardo, pero faltan muchos que se amparan y se escudan con el fuero constitucional, que les ha permitido nadar como muertito.
En poco tiempo, si las cosas siguen, como se están presentando, las celdas de Pacho Viejo, serán insuficientes.
Los que están a buen resguardo, buscan salvarse con alguna medida protectora, y los que vienen, luchan hasta con los dientes por no ser castigados. Uno de esos, es Alberto Silva Ramos, que ya esta a un pasito, por así decirlo, de hacerle compañía, aunque sea de lejitos, a quien saqueó, igualmente, a la Coordinación de Comunicación Social del Gobierno del Estado.
—————————
Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
NUESTRO CORREO: ac_stein58@livr.com.mx
