Javier Duarte, Fidel Herrera y Carlos Salinas.

Veracruz: “poca política y mucha administración”.  

Mario Mijares

1.- En Veracruz, a treinta días de inicio de la presente administración, el responsable del Poder Ejecutivo, no le ha podido dar un vuelco político al problema que viven los habitantes de esta entidad federativa. Sus medidas han sido de carácter mediático y administrativas, e incluso su discurso viene careciendo de esa fuerza que debe tener todo gobernante que se encuentra en una situación de emergencia política, financiera y de seguridad.

Sin embargo, hasta ahora, sólo han sido amenazas, abandonado la toma de decisión política, para dar el ultimátum necesario. Una buena cantidad de veracruzanos, saben quiénes son los que tienen el dinero, él mismo gobernador ha reconocido públicamente que tiene los nombres de toda la pirámide. La falla es que, al día de hoy, muchos de ellos caminan por las calles jalapeñas, inclusive desestimando públicamente al nuevo gobierno. Existen incontables recovecos jurídicos, que se pudieran llevar a cabo, para el rescate del dinero y el encarcelamiento, por tanto, no es justificable el dejarle al gobierno federal la responsabilidad, cuando se sabe que estos están coludidos con Javier Duarte. Es falso que EPN esté preocupado por Veracruz, cómo lo ha aseverado del gobernador en dos ocasiones.

La recomendación es que sería mejor que el Lic. Miguel Ángel Yunes, no apareciera tanto en los medios. Ya que no sólo se desgasta, sino que pierde respeto, y sobre todo el temor de todos sus enemigos y, de aquellos que están al asecho para que fracase en sus intentos. El buen político, debe enviar mensajes con línea, para que sus colaboradores las ejecuten, y él sólo emerger a la luz cuando se obtengan resultados. Cabe agregar que, en casos de conflictos, como los que vive la región veracruzana, el político justo y virtuoso, sobre todo vencedor, tiene la obligación de sujetar al vencido, para que devuelva el daño material causado, esto descansaría en un bien mayor para la población. La beligerancia existente debe atacarse a través del instrumento político, para así lograr acciones con resultados, además de implantar una sana gestión con otros medios.

2.- Al parecer la máxima porfirista de “poca política y mucha administración” está presente, pero sin los Científicos como el gran Limantur a pesar de su séquito de maestros universitarios. Y es que no se puede “gobernar y administrar” al mismo tiempo. El actual responsable del Poder Ejecutivo, tiene que delegar autoridad y exigirle resultados a su equipo de trabajo, el viajar del norte al sur, sólo para aparecer en la foto con las fuerzas armadas, fue una acción que no ha tenido un resultado efectivo. Hay un viejo adagio que señala; “guerra avisada no mata soldado”, esta acción la ejecutó en mala hora, Felipe Calderón y, jamás le funcionó. La guerra al crimen en México, es una invocación recóndita e irresponsable a las fuerzas del Averno, tal pareciera que el Estado Mexicano, carece de inteligencia institucional, pues resulta inverosímil que no sepan quienes y en dónde están las bandas de criminales.

3.- Karl Von Clausewitz militar prusiano, de los más influyentes teóricos de la ciencia militar moderna, señala que “la política interna está en razón de la política externa”, y señor gobernador Yunes, en lugar de estar desgastándose localmente, debiera estar bajando recursos federales e internacionales, con proyectos viables.

La segunda propuesta es que el gobierno de Veracruz, tiene la obligación de crear riqueza, no es posible seguir endeudando a la población veracruzana. Le recomiendo a su equipo de trabajo que estudie los libros El Modelo gerencial, en el sector público (una propuesta para Veracruz) y Gobiernos generadores de riqueza (La administración del futuro) www.palibrio.com.

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